Para escribir mi cuento me base
en la forma: “El binomio fantástico” pedí a mi hermano y mi madre me dijeran
dos palabras sin importar cual, la que primero llegase a sus cabezas mi madre
estaba en la cocina y mi hermano en su cuarto viendo tele los resultados fueron
los siguientes: Mi madre me dijo: Zanahoria, mi hermano me dijo barco, así
encontré la dupla que me ayudaría como base para iniciar mi escritura
Pensé entonces en las posibles
combinaciones:
Las zanahorias escapan del barco
El barco llega a puerto lleno de
zanahorias
Y por ultimo
El barco color zanahoria
Este último me llamo la atención
además porque si somos realistas es extraño ver un barco enorme que navegue por
los mares del mundo de color zanahoria, y mi cuento inicia así:
El barco color zanahoria
A medio día me encontraba con mis tres amigas
caminando lentamente por la playa bajo el sol canicular que nos acompaña todos los días… todas quejándonos por la
tranquilidad del lugar y siempre esperando que algo raro pasara… años atrás
nuestro puerto había cerrado y desde entonces nuestro pueblo se había
transformado en un sitio demasiaaadoooo sereno…
De repente vimos venir a lo lejos
un barco pero de verdad que si era extraño muy diferente a los que habíamos
visto alguna vez tiempo atrás … enmudecimos al verlo anclar a unos 40 metros de
la playa y esperamos con calma para ver quienes desembarcaban… pasaron una o
dos hora y nada de repente vimos una cuerda y un bote en el que descendían
personas pequeñas demasiado raras...
todas de color zanahoria, sus trajes, sus cabellos, sus pieles era
impresionantes… no entendíamos que pasaba hasta que su capitán se acerco a
nosotras y se presento en un acento muy
extraño y dijo las siguientes palabras: “ soy el capitán Zana horia y vengo de un viaje por la vía láctea que
me ha traído hasta aquí… ¿podrían decirme dónde estoy? Nosotras le contestamos
que en la tierra y que éramos muy amistosos el capitán noto el asombro en nuestras miradas
y pregunto que si pasaba algo (era obvio que estábamos aterradas de verlos) lo
único que pude contestarle era que eran muy extraños que no entendía de su
color y que aquí en nuestro planeta
comíamos “zanahorias” el capitán ordeno volver al barco y zarpó de inmediato
muerto de miedo… nuevamente el silencio de apodero de nosotras por un buen rato
y al querer contar a nuestras familias lo sucedido nadie quiso creer en lo que
nos había pasado…
Milena, en nuestro concepto lograste introducir aspectos interesantes para darle "color" a tu barco, lo encontramos acogedor!
ResponderEliminarSaludos
Monica y Liliana